INGREDIENTES (para dos personas):
- 400 g de muslo deshuesado o pechuga de pollo
- 300 g de arroz
- El doble más un cuarto de líquido (puede ser caldo de pollo, agua, agua con pastilla de caldo...).
- 1 cebolla pequeña bien picada
- 2 dientes de ajo bien picados
- Una cucharadita de cúrcuma
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta negra
ELABORACIÓN
- Calentamos el aceite en la sartén y ponemos el pollo a cocinar. Si nos parece bien, lo podemos cortar a trocitos. Cuando lo veamos ya hecho, echamos sal y retiramos del fuego.
- Sofreímos el ajo, y unos segundos después echamos la cebolla a la que echaremos un poquito de sal. Si queremos podemos añadir también otras verduras (pimiento verde, alcachofa...).
- Cuando las verduras se vean hechas, echaremos el arroz y mezclamos bien.
- Añadimos una cucharadita de sal y removemos bien.
- Añadimos el pollo al arroz.
- A continuación echaremos el caldo bien caliente, a poder ser en ebullición, y echamos una parte de la cúrcuma y una parte de la pimienta negra.
- Si el caldo hierve, bajamos el fuego todo lo que se pueda, sin que deje de hervir.
- En total ha de hervir 18 minutos.
- Cuando quede muy poquito para quitar el fuego, echaremos más cúrcuma y pimienta negra.
- Una vez retiremos el arroz del fuego, podemos taparlo con un paño de cocina durante cinco minutos.
Y a comer!
Observación: la cúrcuma tiene numerosas propiedades beneficiosas, especialmente antiinflamatorias, y hay que utilizarla con pimienta negra.
Se aconseja echar una parte al final de la cocción, para que el calor no eche a perder las propiedades.